Skip to main content
Algunos dicen que durante los diálogos no deben plantear modificaciones a la estructura del Estado.

Mientras el Polo Democrático ve que la propuesta de las Farc sobre reforma política recoge buena parte de lo que han planteado otros partidos sobre el tratamiento de la oposición, en ‘la U’ y el conservatismo le responden a esta guerrilla que debe hacer sus planteamientos cuando estén en la vida civil y en cargos que les permitan impulsar los cambios en el funcionamiento del Estado.

Uno de los puntos de las Farc es una “profunda reforma política” que, según dicen, debe “asegurar la contienda política en equidad e igualdad de condiciones, con regulaciones y representaciones especiales para las minorías políticas, las mujeres, los jóvenes, las comunidades campesinas, indígenas y afrodescendientes y demás sectores sociales excluidos”.

Según esta guerrilla, “la reforma debe propiciar la oposición política, incluida la formulación del estatuto de la oposición (…); promover la consolidación de los partidos y movimientos políticos y sociales; garantizar su financiación y democracia interna; regular los avales y las coaliciones políticas, entre otros”.

Para Clara López, presidenta del Polo, los planteamientos de la guerrilla constituyen una “dinámica de diálogo propositivo y constructivo”. Pidió que todos los temas tengan “un legítimo debate”.

“Los puntos de la agenda en algunos casos o en la mayoría de ellos coinciden con lo que el grueso de los sectores de oposición han venido planteando, es decir la necesidad de una reforma electoral, la presencia de las minorías y de los grupos de oposición en la organización electoral y la necesidad de avances tecnológicos como el voto electrónico que permiten luchar contra la corrupción”, dijo López.

Pero el representante a la Cámara por ‘la U’ Hernán Penagos dijo que “si se pretenden modificaciones en los sistemas político y electoral se deben hacer después de todo un debate y no a través de una mesa de diálogo”.

En igual sentido se pronunció el presidente del Partido Conservador, Ómar Yepes. “La recomposición de la estructura del Estado no es un tema que se defina en los diálogos de paz ni tampoco muchos aspectos de la política, económica y social del país”, dijo

‘El país no está contento con dilación de diálogos’: Iglesia

Rubén Salazar, cardenal de Colombia, cuestionó la actitud de las Farc al señalar que están “desubicadas” y que no pueden pretender salirse de la agenda. “Están pensando que en La Habana hay que negociar otro tipo de Estado, y de eso no se trata. Lo que se está negociando es el fin del conflicto”.

El también presidente de la Conferencia Episcopal considera que esa posición del grupo guerrillero hace que los diálogos se descarrilen con facilidad. “Yo espero que las Farc vayan comprendiendo que el país anhela la paz, que el país no está contento con la forma en la que ellos están permanentemente atrasando los diálogos”, puntualizó.

Dijo que pese a los tropiezos espera que haya un acuerdo de paz.

“Pienso que si la meta de los diálogos de paz es llegar al fin del conflicto armado, esa meta se puede alcanzar pronto”, anotó.

Salazar siempre ha insistido en que la situación de violencia que sufre el país no solo obedece al conflicto armado, sino a la inequidad social, la corrupción e, incluso, a la violencia que se vive puertas adentro de los hogares colombianos.

www.eltiempo.com/politica/partidos-politicos-evaluan-propuestas-politicas-de-farc_12919796-4
 

Leave a Reply