Las últimas noches de los habitantes de la comuna 13 de Medellín han sido de desvelo. Según la comunidad, las ráfagas de fusil han perturbado su paz y han generado temor.
Su más reciente noche en blanco fue la del sábado, cuando miembros de la comunidad reportaron la intensificación de los tiroteos por varias horas. Tan duro fue el enfrentamiento entre bandas criminales que hasta el sistema del Metrocable de Occidente debió suspender su operación por unos 15 minutos, a eso de las 10 de la noche, para evitar que las cabinas fueran impactadas.
“Fue bastante fuerte. La más dura de los últimos días. Mi familia y yo debimos quedarnos por horas debajo de las camas mientras todo pasaba”, indicó a EL TIEMPO un habitante de la zona.
De acuerdo con la información preliminar, los recientes enfrentamientos son protagonizados por las bandas el ‘Pesebre’ y los ‘Gaitanistas’, que pelean a muerte por el dominio de rentas ilegales y ollas de vicio. Esa guerra ha generado el desplazamiento de, al menos, 30 familias de sectores como Socorro y Belencito Corazón.
El comandante encargado de la Policía Metropolitana, coronel Ramiro Riveros, confirmó la suspensión por precaución del Metrocable y añadió que la Policía intervino rápidamente. “Reaccionamos en el lugar evitando que continuara la confrontación. Hicimos recorridos en diferentes lugares y no hay información de víctimas”, dijo.
Aunque la presencia de las autoridades en la zona es reconocida por ciudadanos –hay 280 efectivos de la Policía incluyendo 14 bases del Ejército–, los tiroteos y la violencia siguen.
El subsecretario de Seguridad, Jaír Jiménez, sostuvo que los enfrentamientos no han cesado del todo, pero el ambiente en la comuna ha se ha calmado. “Estamos mejor, pero pedimos a la comunidad que denuncie a los responsables de la violencia”, dijo.
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