Mientras la respuesta del gobierno es todo sigue bajo control, no cesa la represión. Continuaron desmanes y agresiones. Dos periodistas fueron agredidos y los campesinos siguen sufriendo las graves consecuencias del uso desbordado de la fuerza en Cauca, Huila, Nariño, Cundinamarca.
La misión médica fue violentada por actuaciones del ESMAD que obligaron a bajarse el personal médico para subir a integrantes de la Fuerza Pública. Testimonios de aquí y allá, que muestran la voz transparente, que nace del alma campesina arrollada por la apertura económica y los acuerdos comerciales. Sigue la vida campesina en persistencia, las convicciones son profundas se requiere otra democracia para que la vida digna de todos sea posible, para que la soberanía alimentaria, para que las fuentes de vida:la humana y la de ecosistemas, no se extinga por el modelo económico.
